Redacción Tuluá
El Periódico
Representantes de Coomeva EPS, en cabeza de Juan Carlos Botero, Gerente Regional, se reunieron con el secretario de Salud, Jorge Humberto Salazar y el personero municipal, Rubén Darío Benítez, para evaluar la situación de los afiliados tulueños.
Durante el encuentro, el Gerente Regional presentó ante los funcionarios el programa de recuperación que ya se encuentra en ejecución a un término de 7 años, con el cual la EPS pretende mejorar las condiciones y atención a sus afiliados.
Dentro de las conclusiones, y teniendo en cuenta la problemática presentada en Tuluá por la suspensión del servicio en la Clínica San Francisco, Botero se comprometió a pagar la deuda que hoy supera los 5 mil millones con dicha entidad; “no es únicamente con San Francisco sino con varias IPS del país, el objetivo es que podamos en el corto plazo cancelar las deudas, en máximo 90 días, para que las clínicas nos puedan brindar el mejor servicio, especialmente en Tuluá”, puntualizó.
Así mismo, el Gerente Regional anunció que la EPS firmó un contrato de intención con el hospital Tomás Uribe Uribe para que esta entidad hospitalaria también pueda prestar sus servicios a los afiliados de Coomeva, con el compromiso de no poner en riesgo al hospital que ya presenta una crisis financiera, y por el contrario, ayudar a subsanar este déficit económico.
Por su parte, el Secretario de Salud, Jorge Humberto Salazar, indicó que su dependencia viene realizando un seguimiento no sólo a Coomeva sino a varias ESP que prestan su servicio en la ciudad. “Nosotros venimos reuniéndonos con las diferentes EPS y aspiramos en un término no muy lejano, a tener reunidas todas las EPS tanto del régimen subsidiado como contributivo para que se articule un plan de beneficios en la atención a los usuarios”.
Finalmente, los representantes de Coomeva, el Secretario de Salud y el Personero Municipal, acordaron reunirse nuevamente a mediados del mes de abril para evaluar el avance y cumplimiento de los compromisos pactados.
“El objetivo es que podamos en el corto plazo cancelar las deudas, en máximo 90 días, para que las clínicas nos puedan brindar el mejor servicio, especialmente en Tuluá”, puntualizó Botero.
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