Redacción Tuluá
El Periódico
Llegar a la Urbanización El Paraíso, a quince minutos del casco urbano de Tuluá, no sólo es encontrar un mundo diferente, es más aún, es retroceder en el tiempo. Sus calles todas sin pavimento, varias de sus casas en mal estado, algunas sin terminar, dan testimonio de las múltiples necesidades, negando la prosperidad de la que habla el Presidente de Colombia.
Pero sigues caminando, y es entonces cuando compruebas, lo sobrecogedor que resulta ver la alegría de sus gentes, quienes pese a sus dificultades económicas, tienen un gran sentido de pertenencia por este pedazo de tierra en donde hace catorce años, liderados por el señor Venancio Valencia (q.e.p.d.), un gran luchador social, empezaron prácticamente a la fuerza a construir el sueño de tener una vivienda propia.
Algunos de sus moradores todavía recuerdan que daban cuotas mensuales de diez, veinte y treinta mil pesos, para poder pagar el millón de pesos que les costaba el lote, el mismo que hoy no dejan tocar por diez ni doce millones ninguno de los 38 propietarios, que aún no han podido construir sus casas.
Entre tanto, los habitantes de las 422 casas que conforman esta urbanización incrustada en el perímetro urbano del centro poblado del Corregimiento de Aguaclara, coinciden que su mayor necesidad es la construcción de un nuevo alcantarillado, que es además, según los alcaldes que han pasado hasta la fecha, la dificultad para poder iniciar alguna pavimentación.
Por esta razón, para la actual Junta de Acción Comunal que preside Gladys Cristina Mesa, su principal petición y reclamo que hace en todos los escenarios del Estado, es un nuevo alcantarillado para El Paraíso, e incluso la semana anterior nuevamente mediante un oficio a la Asociación de Juntas de Acción Comunal que lidera Tulio Millán, les pidió incluir esta obra entre las prioridades que dicho organismo le pasará al Alcalde José Germán Gómez.
La líder comunal destacó el acompañamiento que le ha brindado la Administración Municipal, tras asegurar que todos los programas del área social impulsados por la Secretaría Privada que orienta Lina María Segura, fueron llevados a esa urbanización beneficiando la comunidad.
Además, señaló la líder que en Noviembre, realizaron la fiesta anual de la Urbanización y en Diciembre adelantaron las festividades decembrinas, entregando regalos a un número importante de los 268 niños con que cuenta el sector.
Esta urbanización es especial, aquí las viviendas en su gran mayoría están enterradas, es decir por debajo del nivel de la carretera, por eso desde el año pasado la Secretaria de Obras Mercedes Pineda, junto al Coordinador de maquinaria, Arnulfo Clavijo, emprendieron la tarea de remoción de tierra para la respectiva nivelación, labor que la comunidad espera se reinicie este nuevo año.
Las cerca de cuatro mil personas que hacen parte del recién censo adelantado por la Junta de Acción Comunal, esperan que el Gobierno Municipal y Departamental fije sus ojos en las necesidades insatisfechas en las que están inmersos.
También no se dejan de preguntar,…qué pasó con la sonada pavimentación de la vía a los Caímos, que los beneficiaría en gran parte y que en el gobierno anterior, fue licitada por más de 452 millones de pesos, colocaron la valla en donde aparecía el Ingeniero contratista, el tiempo de ejecución y hasta los metros lineales a pavimentar… pero aún no se inicia dicha obra y aunque han preguntado en diferentes instancias, nadie da razón. La comunidad espera con justa razón respuesta oficial sobre este tema y la construcción del alcantarillado, simultáneo con la nivelación total de terreno, que sería empezar a salir del mar de necesidades en que está inmerso.
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