Redacción Tuluá
El Periódico
La Administración Municipal en coordinación con el ICBF, inició la ejecución del programa de UNICEF “Retorno a la Alegría”, que tiene como objetivo principal brindar atención a niños, niñas y adolescentes de 6 a 18 años en condición de desplazamiento y vulnerabilidad. El programa está direccionado a generar acompañamiento y estrategias de mejoramiento en la calidad de vida de los menores con la realización de talleres reflexivos, lúdicas, recreación, charlas y actividades preparadas, que contribuyan a reducir la secuela de daños emocionales, devolverles la alegría y confianza, inculcarles valores y restablecer los derechos que por diversas razones han sido vulnerados, cumpliendo así con el direccionamiento dado por el alcalde José Germán Gómez, frente a la priorización en materia social de las comunidades vulnerables.
El proyecto contempla atender mil personas en lo que queda del año, ejecutando las actividades durante diecisiete sábados; el trabajo que inició el 28 de julio con un grupo de 300 niños, niñas y adolescentes, recibirán atención hasta el 1 de septiembre, para dar lugar a otras 300 personas que iniciarán el 8 de septiembre y finalizarán el 13 de octubre; el programa finaliza con un grupo de 400 personas que serán atendidas del 20 de octubre al 24 de noviembre. Las actividades se están realizando en el centro recreacional San Pedro Claver y en el centro recreacional de Aguaclara, de 8:00 de la mañana a 12:00 del medio día, con la participación de las Secretarías de Salud y Privada.
Las personas encargadas de orientar a los niños, son jóvenes líderes de 14 a 22 años de edad, estudiantes de las Instituciones Educativas y colegios del municipio que fueron previamente seleccionados y capacitados, ellos se denominan Terapeutas Lúdicos; también están dentro del proceso los Educadores Guía, este grupo está compuesto por docentes, orientadores escolares, psicólogos y trabajadores sociales, así como líderes comunitarios; desde la Secretaría de Salud, habrá acompañamiento constante dinamizando el proceso con apoyo psicosocial y consejería por parte de profesionales en psicología. También se contará con un grupo comunitario de apoyo, compuesto por padres y madres de familia, así como personas de la comunidad.
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