Es un tulueño de mucha vocación y grandes cualidades

Redacción Tuluá
El Periódico

Desde hace tres años aproximadamente y ante la necesidad de la gente de tener una vivienda a precios asequibles, el señor Hernán Rendón Betancurt, se dio a la tarea de invertir unos pocos recursos económicos, fruto del esfuerzo del trabajo y el ahorro, en la compra de lotes para construir casas de tipo familiar é interés social y luego venderlas a precios módicos.
Cuenta el señor Hernán Rendón, que cuando una persona quiere comprar casa, siempre busca precios justos y al alcance del bolsillo, es así como él afanosamente ha contribuido con la reducción de este índice, que como quiera que sea, preocupa muchas familias de bajos ingresos económicos en la Villa de Céspedes.
Hernán Rendón Betancurt, tulueño, nacido y criado en el barrio Rubén Cruz, con un hogar bien y sólidamente conformado, actualmente aspira ocupar una curul en el Concejo Municipal de Tuluá, y para ello cuenta con un programa, que abarca todas las clases sociales, así por ejemplo, el apoyo a las empresas tulueñas, basándose en el programa nacional, que busca estimular con la reducción de impuestos a las empresas que den trabajo a los jóvenes menores de 25 años egresados del Sena.
La otra forma de contribuir las empresas con la educación intermedia de los jóvenes, es patrocinar el estudio en el Sena, quienes luego de culminar sus estudios, puedan ocupar un puesto laboral.
Otro tema de mucha importancia para este inquieto tulueño es, que las empresas del Valle del Cauca y de Colombia que se asienten en Tuluá, tengan unos alivios tributarios de buen orden, a la vez buscar que bequen los jóvenes que deseen capacitarse en el Sena y otras entidades del sector intermedio.
Crear conciencia en los comerciantes, ciudadanos y del gobierno local, para que las obras que se ejecuten en esta localidad, sea con mano de obra tulueña, que los profesionales en diferentes áreas y las firmas contratadas para la ejecución de las mismas, sea de Tuluá, puso como ejemplo, la forma como en Bogotá se utiliza la mano de obra y profesionales oriundos de la capital del país.
En otro Ítem de sus pretensiones esta la cultura de seguridad, así por ejemplo, se debe educar a la ciudadanía para que no dejen sus viviendas solas, que se pongan alertas ante cualquier irregularidad que se observe en sus sectores, en este sentido no se puede culpar constantemente a la policía, ya que difícilmente se puede colocar un policía por cada vivienda o por cada habitante.
Se debe garantizar el apoyo a través del concejo municipal en unión con el gobierno de turno, el sector comercio, empresarial, líderes comunales, cívicos y la misma ciudadanía, en la conformación de los frentes de seguridad ciudadana, fortaleciendo los ya establecidos cuadrantes que con la policía comunitaria, en Tuluá, se ha organizado al igual que las alarmas comunitarias.
Lamenta que en la actualidad esa costumbre y tradición que se tenía en fin de año de compartir dulce, natilla, buñuelos y vino con los vecinos, quedó en el cuarto de San Alejo, lo que en su buen momento representó uno de los pilares fundamentales, para mantener sólida y firme la sociedad del momento, la que gracias a nuestros antecesores, como él lo señala, hoy, podemos contar con una comunidad de respeto, de muchos valores y que busca garantizar para el relevo generacional, un futuro promisorio.
Para él los líderes comunales y cívicos deben capacitarse ampliamente para que al momento de resolver un inconveniente entre el vecindario, puedan direccionar las quejas y así llegar a un final feliz de los problemas que se registren entre las comunidades.
Se debe edificar esta sociedad y la que viene en camino con los que le anteceden a los hoy adultos, sobre la mesa del dialogo, el entendimiento, la confianza, el trabajo honrado y honesto y la tolerancia hacia nuestros semejantes.
Que desde los mismos hogares se imparta esa ley del respeto hacia los demás, existe hoy por hoy muchos inconvenientes familiares, y eso se debe a la desunión de las parejas que sin medir las consecuencias, procrean hijos y luego los abandonan con sus madres, generando un panorama social desalentador, esto se debe erradicar, y se puede conseguir, si se capacita y educa a la población de escasos recursos económicos, que es donde más se presenta este inconveniente, expresó el empresario independiente del sector urbanístico de Tuluá.
Son muchas las familias que se han beneficiado con vivienda propia y digna, gracias a su programa individual de construir casas cómodas y a buen precio.
Manifiesta el señor Hernán Rendón Betancurt, que todos los días y desde muy niño recorre las calles de esta ciudad, recuerda que en su niñez gustaba de coger frutos de los árboles que daban a la calle, los comía sin dañar las plantaciones, nacido en un hogar de sanas costumbres, de mucha educación y respeto por los demás, de una fe inigualable por un ser supremo, que le ha guiado en cada uno de los pasos acertados que ha dado, se conoce de primera mano gran parte de la problemática social de Tuluá, por eso y con mucha autoridad civil deja una serie de recomendaciones y de propuestas a sus amigos los tulueños que le distinguen y los que quieran hacerlo, a fin de recuperar de Tuluá, ese buen lugar y posicionamiento que tuvo en otrora y que por falta de una verdadera gobernabilidad en mandatos anteriores a este, se ha dejado de avanzar hacia el progreso.