Redacción Tuluá
El Periódico
Durante más de dos años el mural elaborado en una de las paredes principales de la sede María Inmaculada de la Institución Educativa Corazón del Valle, para sensibilizar a la ciudadanía sobre la erradicación de la violencia contra las mujeres, permaneció intacto, pero esta semana extrañamente directivos de esta institución ordenaron pintar la pared de blanco.
El mural hecho, producto del trabajo de 20 mujeres de diferentes organizaciones que previamente participaron de un Taller de Pintura y Muralismo Comunitario convocado por la Confluencia de Mujeres de Tuluá y que en su momento contó con el apoyo de Taller Abierto de Cali, fue destruido.
La facilitadora del taller, Olga Milena Barona, e integrante de la Mesa Municipal de Erradicación contra la violencia hacia las mujeres, se mostró extrañada y repudió el hecho, pues manifestó que este mural constituía un símbolo de respeto a la mujer.
Igualmente otras organizaciones de mujeres mostraron su indignación y pidieron que sean sancionados quienes hayan cometido este atropello.
“Ni los vándalos que permanentemente pasan por allí le habían hecho daño al mural, este era uno de los pocos que la ciudadanía había respetado, no tenía ni un solo rasguño pese a llevar tantos años”, comentó la coordinadora de la mesa municipal de víctimas del conflicto en la ciudad de Tuluá.
“El mural que hicieron las mujeres nos había enseñado una forma muy diferente de ver y comunicar; cómo se puede luchar para erradicar las violencias contra las mujeres; además el ejercicio valioso que adelantaron las mujeres mediante el arte del muralismo no puede ser destruido tan miserablemente”, dijo el periodista Samuel Palacio, integrante del Colectivo Nacional de Hombres contra la Violencia de Género, quien propuso la realización en el sitio en donde estaba pintado el mural, de un planto del que participen directivos de la institución y autoridades locales, como acto de desagravio con las mujeres.
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