Redacción Tuluá
El Periódico
Por estos días en la ciudad de Tuluá, la mayoría de las personas ya no hablan ni de cómo va el Cortuluá, o si los Concejales y el Alcalde serán destituidos, sino del sinnúmero de huecos que hay en las vías.
Es tal la situación, que recientemente la Secretaria de Obras Públicas, Mercedes Pineda, dijo en uno de los noticieros radiales, que “toda la malla vial del Municipio se encuentra en mal estado”
Las quejas sobre el mal estado de las vías provienen tanto de los barrios de la periferia como del centro de la ciudad, por donde transitar debe ser agradable, pero incluso hasta en esta parte de la ciudad transeúntes y conductores que constantemente hacen uso de estas calles, sostienen que “Tuluá cuenta con las calles más feas del Valle del Cauca, hasta en el centro, si uno se pone a ver cada vez el daño es peor y las reparaciones que hacen no mejoran sino que empeoran el asfalto”. Por ejemplo, sostiene uno de los quejosos, en el cruce de la calle 28 con carrera 26 se ha venido deteriorando un tramo, aunque han venido la han visto y le han hecho arreglos leves, se pueden observar fácilmente desniveles y huecos que en ocasiones han causado accidentes a motociclistas y ciclistas
De otra parte, algunos comerciantes coinciden que transitar por la Calle Sarmiento es un verdadero desafío, según ellos está calle es muy angosta y algunos vendedores ambulantes están haciendo uso de este espacio público ocasionando que la movilidad sea un caos”. Aldemar Lozano, transeúnte constante de esta vía manifestó: “uno entiende que en los centros de las ciudades del país se ven vendedores en las calles ofreciendo sus productos, pero aquí sí es un caos, pues todo el mundo está sobre la calle y uno como conductor debe estar pendiente del hueco, de la señora que va a cruzar la calle y de los comerciantes informales”.
Sobre la carrera 26 con calle 27, las personas que trabajan allí afirman que ese tramo quedó mal realizado, pues al borde de los andenes han quedado algunas zanjas las cuales están allí desde hace muchos años. “Yo trabajo en este punto hace más de diez años y he visto cómo hay huecos que nunca han sido reparados y en algunas ocasiones quienes van en bicicleta se enredan allí y caen, las personas prefieren bajarse de este vehículo y caminar. Ya han pasado varias administraciones municipales y sólo vienen a medir y tomar fotos pero no hacen nada”, expresó una comerciante del sector.
Lo mismo afirman comerciantes y transeúntes de la calle 25 y la Avenida Simón Bolívar, dos de las vías de Tuluá más transitadas y que se encuentran en franco deterioro.
Recientemente los habitantes del barrio Popular protestaron porque han visto cómo el daño de las principales vías va empeorando con el pasar de los días. “Nos hemos ido a contar los daños de las calles de este barrio y hemos contado más de 20 huecos y eso que todavía nos falta por mirar más sectores”, indicó uno de los quejosos.
A la inquietud de huecos en las calles, se suman habitantes de otros barrios del noroccidente tulueño lo que permite afirmar que “Tuluá está repleta de huecos”.
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