Leyendo a los pre-candidatos a la alcaldía de Tuluá

Por Daniel Potes Vargas

John Jairo Gómez Aguirre
Esta segunda entrevista con los precandidatos a la alcaldía de Tuluá aborda a John Jairo Gómez Aguirre, ilustre abogado tulueño que egresó como bachiller del Gimnasio del Pacífico cuando era rector Ramiro Devía Criollo. Su tesis universitaria versó sobre Conversión de algunos delitos a contravenciones. Hijo de José Gómez López y de Nubia Aguirre Contreras, centra su vida en el núcleo familiar.
Cinco preguntas, como a Luis Bernardo Hoyos, quien enfatizó que es el desempleo el primer problema de Tuluá, le planteamos a John.

• ¿Qué corregiría de su vida?
Quisiera ser más frío, más sereno. Soy muy apasionado.

• ¿Qué método usaría para su campaña?
Los hay menos y más funcionales. Las redes sociales son una gran ayuda para los candidatos, para no desgastarse tanto.

• ¿Qué haría con Cortuluá?
Obviamente no usaría dineros oficiales para sacarlo de apuros. Plantearía la democratización del equipo, al estilo español. Hay que formar una red accionaria, societaria. Es duro, pero debemos comenzar.

• ¿Qué permite el consenso?
Tener su propia dinámica. Entre los nueve que lo configuramos, saldremos cuatro dentro de poco, como representantes. No nos atacamos. Defendemos eso, el consenso como tal, con su dinámica grupal, consensual en últimas.

• ¿Cuáles han sido sus amigos políticos?
Es cierto, ya que no han sido propiamente jefes.

Honorio Vargas Ortiz, Lléner Borja, Freddy Manzano. Ellos recuerdan mi paso como concejal y presidente del Concejo. Ese carisma lo conservo. Propongo una Ética ciudadana, que a su debido tiempo explicaré. Por ahora estudio Derecho Administrativo más a fondo, aunque lo mío fue al comienzo el Derecho Penal. Mis amigos y yo consideramos que Tuluá vale la pena, que hay que luchar por ella y no por unos intereses de pronto menos comunitarios.