8.12.09

CORTULUA El partido definitivo minuto a minuto


Al primer minuto de la final los tulueños sintieron que se les enredaba ese regreso.
El árbitro Óscar Julián Ruíz señaló penal a favor del Atlético Bucaramanga y expulsó al defensa Luis Grueso por una falta en el área, pero el portero de Cortuluá, Mauricio Mafla, atajó el cobro de los 12 pasos lanzado por Marlon Díaz.
Mafla, los palos y más de una dosis de suerte no permitieron que en el estadio Alfonso López los ‘búcaros’ remontaran el 3-0 del partido de ida en Tuluá.
En sus propias palabras el sagüero del Cortulua Mauricio Mafla indico: "Es algo que a uno lo hace sentir que es una responsabilidad enorme, donde debe salvar los doce meses del año", para el atajar el penalti, fue uno de los más emotivos momentos, dado que fue la posibilidad que tenían los Búcaros en desilusionar las aspiraciones del onceno Cortuluá y que la fanaticada tenía sus ojos y fe puesta en este muchacho de Cali.
Mafla sabía que el partido era difícil por cuanto deberían jugarse el todo por el todo en la casa del Bucaramanga y que el equipo rival tenía la responsabilidad de remontar el 3-0 que tuvieron en contra en el estadio Doce de Octubre y que Cortulua debería aguantar el marcador, sabiendo lo difícil que sería porque el Bucaramanga tenía gol, que trabaja muy bien la pelota quieta, el arquero Mauricio Mafla, quien ha pasado por equipos venezolanos (Guaros y Trujillanos), siente que se cumple un sueño.
Entre tanto el entrenador Jesús Barrio se resignaba porque "los goles no se merecen, hay que hacerlos. Nos vamos a concentrar para jugar la promoción contra Pereira".
Bucaramanga dominó en el primer tiempo y debió anotar al menos dos veces, pero se fue en blanco y a los 2 minutos del segundo tiempo un centro desde la izquierda lo aprovecha de cabezazo el goleador tulueño Pablo Jaramillo.
"No pude anotar en el primer partido, pero el fútbol te da revanchas", dijo Jaramillo, quien también ascendió con Equidad de la B a la A. Los ‘canarios’ lucieron confundidos varios minutos. A los 38, los locales descuentan con un penal cobrado por John Ulloque.
El volante Óscar Díaz, con pasado en 6 equipos profesionales, se convirtió en el eje de control. "Siempre es emocionante ser campeón", decía a la hora que en Tuluá resonaba la alegría de las caravanas.
Por su parte el gerente deportivo de Cortuluá Juan Carlos Hurtado Romero indicó que el triunfo obtenido lo tiene muy contento al igual que a sus directivos, a los tulueños y vallecaucanos porque se genera una nueva dinámica en la ciudad de Tulúa, la gente se mostró contenta y satisfecha por el triunfo, luego de 5 años de un equipo sumido en la primera B, con una serie de inconvenientes económicos y deportivos, que por fortuna el todopoderoso fijo su mirada en estos muchachos que con arranque, tesón y dedicación no vacilaron en dejar el nombre de Tuluá y el Valle del Cauca muy en alto, con el resultado de suma importancia, expreso el gerente deportivo del Cortuluá.
De hecho se espera una planificación total desde el punto de vista deportivo por parte del cuerpo técnico, ya que con el grupo administrativo se viene trabajando en aras de conseguir los recursos económicos que permitan oxigenar el nuevo equipo de los vallecaucanos que entra a formar parte de la primera A, agrego el directivo.
El onceno del municipio de Tuluá en el departamento del Valle del Cauca contó con toda una artillería pesada que logro detener los ataques del Bucaramanga y en el toque clásico y acertado, el envió oportuno y directo, los pases largos y a territorio de los suyos, el contra ataque de las defensas y el pulso del zaguero para detener los tiros desde todos los puntos, hicieron que los muchachos del Cortuluá se lucieran y fueran aplaudidos por seguidores y los vallecaucanos, que no se perdieron detalle alguno del compromiso futbolero.
En el campo de juego se encontraban: Mauricio Mafla; Yonny Hinestroza, Luis Grueso, Carlos Terranova, John Jairo Montaño; Baldomero Perlaza, Óscar Díaz, Alex Hinestroza, Deivi Rodríguez; Pablo Jaramillo, Alonso Asprilla. DT: Fernando Velasco.
Cambios: 8′ Jonathan Muñoz por Baldomero Perlaza, 23′ Léiner Rolong por Alonso Asprilla. Amonestados: Deivi Rodríguez. Expulsados: 1′ Luis Grueso. Gol: 47′ Pablo Jaramillo.

Luego del partido y regreso a Tuluá

El regreso de Cortuluá a casa, donde lo esperaban miles de seguidores, fue tan eterno como el primer tiempo del partido de vuelta frente al Bucaramanga. Tuvieron que pasar nueve horas para que los aficionados del onceno tricolor pudieran abrazar a sus héroes y tributarles el homenaje que se merecían por el ascenso a la primera división.
El reloj marcaba las 2:30 en la mañana, tres horas después de haber llegado al Aeropuerto Alfonso Bonilla Aragón, cuando en la variante se asomó una bulliciosa caravana llena de luces, se trataba de dos chivas, la segunda de las cuales transportaba a la plantilla tulueña, provocaron de inmediato la movilización de un centenar de motocicletas que prendieron el inicio de la época decembrina en el ‘corazón’ del Valle.
El ingreso al centro, en especial al parque Boyacá, se hizo de manera lenta y formando prácticamente un cuello de botella en las calles, durante casi 20 minutos, en medio de los gritos de "campeón, Cortu campeón".
Uno a uno fueron subiendo los jugadores y el cuerpo técnico a la tarima dispuesta para celebrar con los hinchas, interpretando en coro "De la B, nos fuimos de la B", fue el segundo estribillo escogido por los hinchas, muchos de ellos ya entrados en tragos y con sus cabezas teñidas de harina.
El gobernador Juan Carlos Abadía y el alcalde de Tuluá, Rafael Eduardo Palau, subieron al entablado para prometer $1.000 millones de parte de la Licorera y de la Alcaldía como patrocinio para jugar en la primera división.

Promesas del Gobernador del Valle y el Alcalde
En la madrugada del lunes, tras el arribo del equipo campeón a la ciudad de Tuluá, en la tarima montada en el parque de Boyacá, el gobernador del Valle del Cauca, Juan Carlos Abadía, se comprometió ante la afición tulueña a patrocinar a Cortuluá en la primera división del fútbol profesional colombiano.
Prometió que a través de la Industria de Licores del Valle, patrocinará al equipo corazón con al menos 500 millones de pesos, y desafió al alcalde de Tuluá, Rafael Eduardo Palau, a poner una cifra a su patrocinio. Palau, le recordó que había un compromiso de la Alcaldía de Tuluá a poner un peso por cada peso que pusiera la Gobernación del Valle, y le hizo un reto: "suba la apuesta, Gobernador, suba la apuesta".
Si se cumplen estas promesas, Cortuluá contaría con al menos mil millones de pesos de patrocinio público para el año 2010.